La Cruz y Arzola, dos oros por CubaJulio César La Cruz (rojo), de Cuba, combate frente a Marlon Hurtado, de Colombia, en 92 kg en la final del boxeo con sede en el Ministerio de Relaciones Exteriores, durante los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador, el 28 de Junio de 2023 en San Salvador, El Salvador. FOTO: Calixto N. Llanes/Periódico JIT (Cuba)
La Cruz y Arzola, dos oros por Cuba
Julio César La Cruz (rojo), de Cuba, combate frente a Marlon Hurtado, de Colombia, en 92 kg en la final del boxeo con sede en el Ministerio de Relaciones Exteriores, durante los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador, el 28 de Junio de 2023 en San Salvador, El Salvador. FOTO: Calixto N. Llanes/Periódico JIT (Cuba)

Conquistaron los cetros ansiados por el boxeo cubano, esquivos para sus compañeros y por los que un “buque” llegó a San Salvador el 19 de junio.

En esa competencia- confraternización que son los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Julio César La Cruz (92 kilogramos), abanderado de la delegación antillana a la cita multideportiva, cumplió su palabra empeñada porque experiencia y recursos le sobran para enfrentar cualquier adversario.

Y amplió su palmarés a tres títulos centrocaribeños, resultado con el que, asegura, aporta su granito de arena al esfuerzo de Cuba de lograr un puesto de vanguardia en el medallero por naciones en esta lid.

Me siento en perfectas condiciones físicas, si hubiera llegado al Mundial en esta forma no perdía, hubiera sido el mejor boxeador del evento, precisó el doble campeón olímpico y cinco veces titular del orbe.

Todas las competencias son fuertes, no considero a ningún rival de menor calidad, solamente hago mi trabajo, dijo a la prensa tras su triunfo en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador quien tiene la mira puesta en París 2024, en busca de su tercera corona olímpica.

Soñar no cuesta nada y lo hago en base a la realidad, refirió, y dedicó la victoria a los pueblos cubano y salvadoreño, a su mamá, su familia y a todos los que han aportado en carrera.

Con su mítico saludo militar, La Sombra recibió la decisión de los jueces- unánime- frente al colombiano Marlon Hurtado.

Poco después, abrazó y aconsejó a su seguidor Fernando Arzola (más de 92 kilogramos), cual padre que le desea buena suerte a su hijo.

El superpesado no reparó en el ring ante el también cafetero Cristian Salcedo, un atleta más experimentado, y apenas en el segundo asalto definió la pelea por RSC.

Aproveché el momento para salir victorioso, con buenos intercambio y fuerza, explicó el subtitular mundial en Taskent este año.

Alcanzar el primer lugar en los Juegos Panamericanos y lograr una medalla en la cita bajo los cinco oros se vislumbran como aspiraciones inmediatas del boxeador de solo 20 años de edad.

Para ello, aseveró el santiaguero, continuará trabajando, pues por Cuba siempre lo va a dar todo.

Se incumplieron los propósitos con el equipo masculino, pero este elenco ha sido renovado en un 77 por ciento, y se trata de una tercera generación de pugilistas, consideró Rolando Acebal, jefe de entrenadores.

Destacó que no se sienten satisfechos con los resultados, pero “vamos a seguir trabajando, porque momentos como estos los ha asumido el boxeo cubano y hemos salido adelante”, precisó,

A estos muchachos hay que seguirles dando competencia, pues tienen futuro y talento, solo queda tiempo de trabajo; un boxeador no se forma de un día para otro, dijo.

La mayor de las Antillas cerró con dos cetros, igual cantidad de platas y cinco bronces, cifras que la ubican en el tercer puesto del medallero por países en la disciplina, por detrás de Colombia (5-4-2) y República Dominicana (2-4-3)