Guantánamo – La gratitud se refleja en el rostro de Martha Guilarte Bulgar, una de las 183 guantanameras beneficiadas con el programa de la Asistencia Social, al percibir su salario por ser madre de un joven sordo, ciego y con retraso mental moderado.

Cuenta Martha que desde hace más de veinte años recibe esta ayuda, ya que Alexei nunca pudo acceder a un puesto de trabajo, y ella realizó varias labores, cuando su otro hijo permanecía en el hogar, atento a su hermano que requería de cuidados.

“La Revolución no deja a nadie desamparado”, afirma esta guantanamera, quien destaca la cercanía de los trabajadores sociales y como aún, en medio de complejas circunstancias, ella puede dedicarse a atender a su vástago que ya cumplió 39 años.

Además de percibir su salario, Martha Guilarte  Bulgar ha recibido módulos de ropa, aseo, sábanas, toallas, gesto que agradece esta guantanamera, beneficiada con el programa de la asistencia social que también extiende su protección a más de cinco mil familias en esta oriental provincia, entre las que se encuentras 183 madres de hijos con discapacidad severa.

La periodista Ileana Rodríguez Acosta aporta mas información sobre el tema en el siguiente reporte.