El VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba sesionó durante este viernes y el sábado bajo la conducción de su primer secretario, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

En agenda estuvieron la producción de alimentos y la prevención y enfrentamiento a la corrupción, las ilegalidades e indisciplinas sociales.

Radio Guantánamo ofrece a sus seguidores una secuencia de las publicaciones y repercusión sobre la importante cita.


Diaz-Canel : Los tiempos no son ni de autocomplacencias, ni de inercias que no sepamos romper

“Han sido críticos los análisis de este VIII Pleno partidista, como deben serlos siempre que un militante comunista reflexiona y se expresa sobre los desafíos y posibles soluciones para su país”, valoró este sábado en la tarde, en sus palabras conclusivas de la importante reunión, el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

Al final de una jornada de dos días de intenso trabajo que tuvo como escenario al Palacio de la Revolución, el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba dijo a los delegados al Pleno del Comité Central de la organización política: “Los tiempos no son ni de autocomplacencias, ni de inercias que no sepamos romper. Nuestro pueblo reclama resultados, y a ese pueblo nos debemos”.

“Las palabras de quienes han intervenido aquí, con la experiencia del trabajo cotidiano allí en la base, muestran las luces, las potencialidades, y la fortaleza de una Revolución que no nació para el pesimismo y mucho menos para la derrota”.

“Los convoco -enfatizó el dignatario- a la rectificación como práctica permanente, a enfrentar con voluntad, esfuerzo e imaginación, las tendencias negativas que emergen como la mala hierba en los momentos difíciles”.

“La convocatoria ahora es salir al combate, como sabemos hacerlo, como tantas veces en la historia lo hemos hecho, y convertir en hechos palpables y en resultados lo que aquí hemos analizado entre todos”.

El Jefe de Estado afirmó que “es ese el mejor homenaje a los héroes y mártires del 26 de Julio, y es la mejor respuesta a nuestro inmenso héroe de todos los días: nuestro pueblo”.

En sus palabras de cierre, y al referirse al “querido General de Ejército Raúl Castro Ruz, quien está siguiendo en detalle este Pleno”, así como a las compañeras y compañeros miembros del Comité Central, e invitados, el Jefe de Estado compartió su certeza de que “este Pleno se ha caracterizado por un amplio debate, participativo, aportador, y donde es apreciable el nivel de identidad que hay entre los temas que se han sometido a debate como parte de la agenda de este Pleno, y los principales problemas que tiene el país”.

Y seguidamente hizo énfasis en que tal logro “no es suficiente”, porque “hay que actuar y consolidar soluciones que nos aporten resultados en la superación de los complejos problemas que enfrentamos hoy en día”.

Esa idea dio paso a que el mandatario trajera a colación un pensamiento del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, según el cual es en los tiempos difíciles cuando sucede que hay quienes se confunden, quienes se desalientan, quienes se acobardan; hay quienes se reblandecen; hay quienes traicionan; hay quienes desertan.

Eso pasa -había dicho Fidel y así lo recordó este sábado el Presidente cubano- en todas las épocas y en todas las revoluciones. Pero también en los tiempos difíciles es cuando realmente se prueban los hombres y las mujeres, había definido el Comandante en Jefe, quien también dejó hermosamente definido, como evocó Díaz-Canel, que “los tiempos difíciles son la mejor medida de cada cual”.

El dignatario enunció que, “mirando la actual situación desde la profunda verdad que encierran esas palabras de Fidel, las dificultades cotidianas, tan enormes que a veces parecen insuperables, no son una desgracia: son una prueba de nuestra capacidad para enfrentarlas y vencerlas”.

“Yo lo veo de la siguiente manera: cada jornada en la que logramos someter esas grandes dificultades con tesón, con esfuerzo, con creatividad, con talento, con unidad en los propósitos; en fin, cada día de la Revolución en el poder, contra el plan genocida de su enemigo histórico, es un triunfo, y es una victoria”.

“Digo más: algo tan aparentemente simple como 24 horas en la vida de esta nación cercada, amenazada, atacada, es otra victoria del pequeño David frente al gigante Goliat; otra confirmación de que sí se puede, como dijo y demostró el General de Ejército en tiempos tan o más difíciles”.

El mandatario destacó que “esa es la experiencia de la Revolución cubana y la mejor expresión de su continuidad”. E hizo hincapié: “Las ideas y las obras innegables de Fidel, de Raúl, del Che y de todas las mujeres y hombres que con su entrega y su sacrificio trajeron a la Revolución invicta hasta nuestros días, nos inspiran y nos empujan”.

“Así se va conformando una línea de acción que estamos convocados a someter constantemente a análisis, para enriquecer, para corregir, y también para desechar lo que fracasa”.

“Por supuesto -destacó-, esa línea de acción no da soluciones mágicas, no impacta de inmediato, pero gradualmente va quitándole pedacitos a cada problema, cuando cada uno de nosotros y cada una de nuestras instituciones hacen lo que toca, desde un auténtico compromiso con el pueblo y con la enorme responsabilidad de preservar la Revolución, que es sencillamente preservar sus conquistas y seguir avanzando en el camino de perfeccionar la sociedad, trabajando sin descanso”.

El Jefe de Estado resaltó que lo anterior “debe acompañarse de una profunda autocrítica y la crítica constante a lo que hacemos mal o a lo que no da los resultados esperados, rompiendo inercias y rutinas, desterrando el lamento quejoso que paraliza”.

“El Partido y sus cuadros tienen la misión de estimular, inspirar, movilizar, comprometer a sus militantes y al pueblo, conscientes de que solo triunfa el ideal que nos involucra a todos. Toca a los cuadros políticos ir a la vanguardia con el ejemplo como estandarte y la convicción profunda de que solo es posible avanzar trabajando duro, con inteligencia, con creatividad, conscientes de que en cada uno de nosotros están las potencialidades para crecer y superarnos”.

Y seguidamente subrayó: “El camino está claro: trabajar, producir, crear riqueza, distribuir con justicia social, y retroalimentarnos en el heroísmo cotidiano del pueblo, abriendo espacios para que los jóvenes aporten con su participación activa, entusiasta y siempre revolucionaria, en la búsqueda de cambiar todo lo que debe ser cambiado”.

El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista recordó que “el país está lleno de trabajadores que en las peores circunstancias están encontrando soluciones”. Por eso convocó a todos a tomar “esas valiosas experiencias, que todavía son la excepción”, para convertirlas en reglas.

“Les aseguro -expresó- que el país está lleno de personas que inspiran, de genios anónimos de la resistencia creativa, de mujeres y hombres imprescindibles, cuya ejemplar respuesta a las carencias debemos reconocer, estimular y multiplicar. No veo tarea más inspiradora para quienes sentimos en lo más hondo lo que significa representar al Partido Comunista de Cuba”.

En un momento de su intervención el Jefe de Estado compartió esta interrogante: “¿Qué debemos dejar claro en tiempos como estos?”. Y ese fue el punto de partida para que dijese que “en primer lugar, ratificamos la voluntad de avanzar en la construcción socialista”.

“Eso significa defender ante todo los intereses y las necesidades del pueblo, la máxima consideración hacia él, la preocupación constante por el pueblo, y preservar las conquistas de la Revolución para ese pueblo; batallar por una economía sana y eficiente, que garantice la justicia social, y el mayor grado de bienestar posible para la población”.

“En primer lugar -siguió reflexionando el dignatario- es preciso garantizar un mejor y mayor acceso a la alimentación. La producción de alimentos y el autoabastecimiento son tareas de primer orden, en las que tiene que participar toda la población”.

“En las actuales circunstancias, debemos promover la ciencia, la innovación y la agroecología en la producción de alimentos, bajo una premisa política: la voluntad de luchar y de vencer, como vía para salir de las dificultades, contando con la inteligencia de un pueblo totalmente innovador”.

En la misma línea de pensamiento el Presidente cubano dijo que “se requiere de un trabajo especial con la juventud y en la formación de nuestros jóvenes. Eso parte de una premisa: tenemos que lograr una formación integral de nuestros maestros y de nuestros profesores”.

“Hay que crear y desarrollar conciencia, moral revolucionaria, ver el trabajo en su expresión formadora, como cumplimiento del deber y como la actitud de aportar a la sociedad. Potenciar la defensa del concepto de Hombre y Mujer nuevos, que defendió el Che, con la convocatoria constante de Fidel a defender y enriquecer esas concepciones”.

Díaz-Canel hizo referencia a la importancia de “la convicción de que vamos a salir de estas dificultades, como lo hemos hecho siempre, combatiendo, con la misma decisión de Baraguá, del Moncada, del Granma, de Girón, y con las firmes convicciones que nos inculcó el Comandante en Jefe”. A eso, dijo, “nos convocó Raúl, y eso es lo que tenemos que hacer”.

En sus palabras conclusivas el mandatario recordó y explicó las cuatro prioridades trazadas por el Partido Comunista a inicios del presente año. Sobre ellas, hizo énfasis en que se les han venido dando “sistemáticos seguimientos en los recorridos mensuales por provincias y por los municipios del país, y en diferentes momentos del sistema de las estructuras del Comité Central del Partido”.

En otro momento de su intervención el dignatario abordó “la compleja situación del país”, la cual “se manifiesta hoy en la inestabilidad para asegurar oportunamente el suministro de productos de la canasta básica; en la inestabilidad en el Sistema Electroenergético Nacional; en la existencia de precios muy elevados, especulativos y abusivos, que limitan el poder adquisitivo de una parte considerable de la población; en las manifestaciones de indisciplina y violencia social y vandalismo, que atentan contra la tranquilidad ciudadana”, entre otros problemas.

Esta situación, dijo, “exige implementar de inmediato acciones concretas, bien aseguradas, con el debido control, las que deben ser apoyadas con una adecuada estrategia de comunicación política e institucional”.

El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista afirmó que “hay que tener un sistema de trabajo”; y habló sobre la necesidad de que “cada acción o medida que nos propongamos implementar” sea tratada “como si fuera un programa o un proyecto, con una adecuada estrategia de presentación a la población, para lograr su comprensión y apoyo, y así la participación”.

Habló de hacer “que se cumpla lo aprobado, definiendo bien los objetivos, preparando bien a los ejecutores de cada medida, propiciando el aseguramiento político, material y financiero de su implementación, planteando las acciones con un cronograma de implementación para que no se nos quede en el aire y en el discurso, y sobre todo ejercer el control para las correcciones, los ajustes y la retroalimentación necesaria”.

“Si trabajamos en todos estos ámbitos simultáneamente, de manera decidida, organizada, coherente, en poco tiempo estaremos ordenando temas fundamentales como el déficit presupuestario, el exceso de efectivo circulante, la evasión fiscal, los precios abusivos; estaremos ordenando las adecuadas relaciones entre el sector estatal y el sector no estatal; estaremos enfrentando de manera más decidida el delito y la corrupción; estaremos propiciando más ofertas a la población; y todo esto indirectamente también influirá sobre modificaciones en la tasa de cambio, de manera gradual, y en la inflación; y estaríamos aportando a la solución de importantes problemas que tiene que enfrentar nuestra sociedad”.

Hacia el final de sus palabras, el mandatario resaltó: “Aquí estamos para salvar la Patria, la Revolución y el Socialismo. El bloqueo no ha podido en seis décadas vencer la dignidad del pueblo cubano ni la inmensa obra colectiva y social de la Revolución. El bloqueo recrudecido en estos tiempos, tampoco lo logrará”.

“El pueblo cubano continuará asestando reveses al imperio, y como expresó el General de Ejército, la historia ha demostrado que sí se pudo, sí se puede, y siempre se podrá”, afirmó el Presidente Díaz-Canel.


El respeto a la legalidad y a la disciplina es una muestra de patriotismo

Un profundo y crítico informe, que recoge las principales manifestaciones de corrupción, delito, ilegalidades e indisciplinas sociales que se manifiestan en la sociedad cubana actual, así como las acciones que se han diseñado e implementan para su prevención y enfrentamiento, fue evaluado este sábado durante la segunda y última jornada del VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista.

En este punto de la agenda de la reunión —encabezada por el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez—, Julio César García Pérez, jefe de la Oficina de Atención al sistema del Poder Popular, órganos del Estado y el sector Jurídico, al presentar el referido documento, aseguró que “la batalla contra el delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales ha recibido especial atención por la dirección del Partido, el Estado y el Gobierno desde los primeros años de la Revolución”.

De igual forma, recordó que los debates y documentos aprobados durante el 8vo. Congreso del Partido, en abril de 2021, ratificaron “la prioridad hacia esa dirección estratégica, que se resume en fortalecer el papel del Partido con su participación, apoyo y control en las acciones de prevención y enfrentamiento a todos los fenómenos y manifestaciones que constituyan una amenaza para la seguridad nacional”.

Según refirió el funcionario, “la implementación y cumplimiento de las acciones políticas, gubernamentales, preventivas, de enfrentamiento jurídico-operativas, penales, penitenciarias y comunicacionales, ha posibilitado la contención actual de algunas tipicidades delictivas de mayor gravedad y evitado que se generen situaciones más graves”.

No obstante las acciones realizadas, subrayó, los “resultados son insuficientes, toda vez que no se ha logrado el efecto deseado en la disminución del delito, que se mantiene con cifras elevadas y rasgos de complejidad en determinados casos”.

Al resumir los principales delitos tipificados dentro de la sociedad cubana señaló que los de mayor incidencia continúan siendo los que atentan contra el patrimonio, en los cuales se reitera la implicación de personas desvinculadas del estudio y el trabajo y de jóvenes en casos de mayor gravedad.

Asimismo, destacó los hechos contra el ganado mayor; los ilícitos de drogas en los cuales cada vez se aprecia mayor complejidad, a partir del incremento de los intentos de introducción de estas al país por diferentes aeropuertos; los delitos que atentan contra el orden económico y las conductas de corrupción administrativa; la no declaración o subdeclaración de ingresos, y la proliferación de ilegalidades en el ordenamiento urbanístico.

A ello se une, además, que no se logra el enfrentamiento efectivo a los precios abusivos y especulativos de bienes y servicios; se mantiene la comercialización ilícita de diversos productos, la receptación, la especulación y el acaparamiento; al tiempo que persisten manifestaciones de indisciplinas sociales en los espacios públicos, daños a parques y medios de transporte, alteración del orden, riñas y otras.

Ante ese escenario, explicó que el Ministerio del Interior ha continuado reforzando sus sistemas de integración para la prevención y el enfrentamiento a esos hechos, a lo cual se suman las medidas adoptadas por la Fiscalía General de la República y el Tribunal Supremo Popular para incrementar el rigor en el tratamiento jurídico, penal y penitenciario de los imputados, acusados o sancionados, especialmente a quienes ocasionan mayor daño a la sociedad.

Al referirse propiamente al trabajo desde las estructuras del Partido, explicó que “la evaluación del tema en los burós, comités y plenos es superior a etapas anteriores, aunque resultan insuficientes las acciones de control y la exigencia relacionadas con este asunto”.

En las reuniones de los comités municipales del Partido con los secretarios generales, acotó, no siempre se logra preparar adecuadamente a la dirección de los núcleos para la discusión con la militancia y la evaluación de casos que sirvan de experiencias.

La atención a estos fenómenos sociales, valoró, adquiere especial importancia en las actuales circunstancias que vive el país, debido a su trascendencia a las bases mismas del proyecto socialista que construimos.

De ahí la prioridad que desde el Partido, con la participación de instituciones y la población, se concede a su prevención y enfrentamiento, señaló.

ENFRENTAR ES CLAVE PARA PREVENIR

De cara al debate, varios primeros secretarios de comités provinciales del Partido compartieron elementos sobre la manifestación de esos hechos en sus respectivos territorios, al tiempo que se refirieron a acciones puntuales que en ellos se realizan para contrarrestarlos.

Entre las ideas expuestas, comentaron acerca de la importancia de incrementar el rigor de las medidas que se aplican a quienes incurren en delitos; lograr que la evaluación sobre esos temas en los núcleos sea cada vez más profunda; perfeccionar las rendiciones de cuenta, así como evaluar conscientemente las causas que conducen a determinados delitos, que en muchos casos tienen origen social y son sumamente diversas.

Al respecto, la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó Cabrera, llamó la atención sobre la responsabilidad que corresponde a todos, tanto en el barrio como en las instituciones en lo referido a las acciones de prevención. En tal sentido, destacó el desempeño de los trabajadores sociales en las estructuras comunitarias y cómo su accionar puede contribuir a contrarrestar esos hechos.

Por otra parte, la fiscal general de la República, Yamila Peña Ojeda, tras hacer alusión a la repercusión que tienen los delitos tanto en el orden económico como social, aseguró que la práctica es mantener políticas de severidad en el enfrentamiento jurídico penal, a partir de las cuales se respeten las garantías y derechos de los ciudadanos sin dejar de mantener la soberanía y el orden social.

Solo la existencia de normas, precisó, no va a propiciar su cumplimiento, además es necesario realizar evaluaciones sistemáticas, con control e integralidad, para poder enfrentar esos fenómenos que son sumamente complejos.

Medular y sumamente aleccionadora resultó la intervención de la contralora general de la República, Gladys Bejerano Portela, quien reconoció cómo el Partido está empeñado y trabajando para mantener el alma de la Revolución cubana, y en ese camino es imprescindible llegar a todos los militantes.

La ejemplaridad, argumentó, no es solo trabajo y mucho trabajo, hay que trabajar buscando soluciones y esas se buscan con las enseñanzas que se han expuesto en este pleno y se viven en el día a día. Eso también es cumplir eficientemente con la tarea que nos ha dado la Revolución, valoró.

No se puede entender, subrayó, que en un lugar haya militantes y sean indiferentes a hechos de corrupción: no combatir también es contrarrevolución. “Si no funciona el enfrentamiento ni combatimos la tolerancia, no se puede hablar de prevención”, reflexionó.

El respeto a la legalidad y a la disciplina —acotó— es una muestra de patriotismo.

Finalmente, llamó la atención sobre la importancia de hacer llegar a la militancia todo lo que durante estas dos intensas jornadas de trabajo se ha debatido, pues “solo así lo que aquí ha sucedido tendrá frutos”.


En la producción de alimentos falta mucho por hacer

El papel del Partido y los cuadros a todos los niveles para alcanzar un incremento sostenido en la producción de alimentos y que estén presentes en cada una de las comunidades del país, en cada mesa de las familias cubanas, a precios accesibles, centró las primeras horas de trabajo de la jornada sabatina del VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

El análisis de los resultados alcanzados en la producción de alimentos y la implementación de la Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional (Ley SSAN), ocupó esta vez la sesión del órgano partidista.

El encuentro transcurrió desde el viernes en el Salón de los Plenos del Palacio de la Revolución, encabezado por su Primer Secretario y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y conducido por el miembro del Buró Político y Secretario de Organización, Roberto Morales Ojeda.

El miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y Jefe del Departamento Agroalimentario, José Ramón Monteagudo Ruiz, tuvo a cargo la presentación de un informe objetivo y crítico, que luego fue enriquecido por más de una docena de intervenciones.

En medio de la compleja situación económica, quedó evidenciado que «existe compromiso y disposición en los colectivos de trabajadores para avanzar, lo que se demuestra en múltiples ejemplos de productores destacados en cada territorio, en las diversas ramas del sector agropecuario, que se deben generalizar, porque constituyen la demostración del “Sí se puede”» del General de Ejército Raúl Castro Ruz, cuya máxima de que «¡hay que virarse para la tierra! ¡Hay que hacerla producir!», continúa siendo premisa.

La evaluación de lo alcanzado y lo mucho por lograr, reafirmó que el Partido mantiene su labor de vanguardia en todas las esferas, particularmente en las relacionadas con la producción de los alimentos, y que la participación de los militantes es decisiva.

Se ratificó, empero, que para alcanzar la soberanía alimentaria es indispensable incrementar los resultados de los diversos programas, a partir de una mayor integración y proactividad de todos los organismos con responsabilidad ante la Ley SSAN, no solo de los que están más vinculados a estas producciones, como los ministerios de Agricultura e Industria Alimentaria y el grupo Azcuba.

El Jefe del Departamento Agrolimentario del Comité Central del Partido (CC-PCC) recordó que el 8vo. Congreso de la organización aprobó el Lineamiento 138, «que concibe implementar el Plan Nacional de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional, con la integración de los organismos y entidades del país, en articulación con los procesos de gestión del desarrollo territorial, aprovechando las potencialidades locales y los encadenamientos productivos»,

El Informe Central del principal cónclave del PCC, celebrado en abril de 2021, también precisaría, añadió Monteagudo Ruiz, «la necesidad de defender el incremento de la producción nacional, en especial de los alimentos, desterrar el dañino hábito de importarlos y generar exportaciones diversificadas y competitivas».

En este sentido, se enfatizó ahora, en el VIII Pleno, que le corresponde al Partido continuar desarrollando su labor para impregnar entre los militantes la necesidad de asumir el desafio de producir los alimentos que necesitamos, con la menor dependencia externa, avanzando con nuestros propios esfuerzos y con una utilización más eficiente de los recursos disponibles.

Se destacó, en este sentido, que la intensa labor desplegada por la máxima dirección del PCC, encabezada por su Primer Secretario, en los recorridos y visitas a los territorios durante este año, ha permitido fortalecer el trabajo de la organización en este sentido y confirma la voluntad de continuar atendiendo las principales inquietudes de nuestro pueblo de forma priorizada y personal.

Al análisis sobre la producción de alimentos y la implementación de la Ley SSAN presentado en el VIII Pleno, lo precedió un proceso de consulta en las estructuras de dirección y de base del Partido y la UJC relacionadas con el sector agroalimentario.

También se intercambió con organizaciones de masas, consejos de gobiernos provinciales, asambleas municipales del Poder Popular y consejos de la administración municipales. La consulta abarcó 10 329 organizaciones de base y participaron 96 789 militantes del Partido y la UJC, junto a 25 269 trabajadores no militantes, lo que generó 62 366 intervenciones.

En el proceso, explicó Monteagudo Ruiz, «fueron identificadas las causas que inciden desfavorablemente en la producción de alimentos y se realizaron propuestas encaminadas a la búsqueda de soluciones que nos permitan transformar los problemas y avanzar en el escenario actual».

Se realizaron, además, visitas especializadas de la Estructura Auxiliar del Comité Central del Partido a todas las provincias. Se interactuó en 50 municipios, así como empresas, unidades productoras, mercados y otras entidades del Minag, Azcuba y el Minal, con intercambios con más de 2 900 personas.

DE LA LEY SSAN Y OTRAS FORTALEZAS

La implementación de la Ley 148/2022, Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional, su Reglamento y el Decreto 67, tienen como objetivo promover la movilización de los recursos de cada territorio y organizar los actores de los sistemas alimentarios locales.

La normativa otorga a los municipios la autonomía necesaria para impulsar la producción de alimentos, y uno de los elementos esenciales en su implementación es la creación, consolidación y desarrollo de los Sistemas Alimentarios Locales (SAL) y del Sistema Empresarial Agroindustrial Municipal.

Hasta la fecha, informó Monteagudo Ruiz, se han traspasado o autorizado, 111 empresas en 105 municipios y se identifican 21 programas que tributan al autoabastecimiento alimentario municipal.

«Estas empresas, explicó, están llamadas a desempeñar un papel fundamental en los sistemas productivos a nivel local; de ahí la necesidad de prestarle una atención priorizada en aspectos esenciales como la Política de Cuadros, el fortalecimiento de sus estructuras de dirección, el completamiento de la fuerza de trabajo, la situación económica financiera y la recuperación de su capacidad productiva».

Al mismo tiempo, en los últimos años se han adoptado otras decisiones para dinamizar el sector, como las 63 medidas de 2021, que propiciaron la eliminación de trabas y la flexibilización de procesos en beneficio de los productores agropecuarios con una participación activa de estos.

El país dispone de 6 400 755 hectáreas de tierra agrícola, de las cuales el 79 por ciento es propiedad estatal, el 13 por ciento privada y el ocho por ciento propiedad cooperativa. Más del 80 por ciento de la producción de alimentos en Cuba proviene del sector cooperativo y campesino. Se cuenta con 128 823 propietarios de tierra y más de 275 000 usufructuarios, que gestionan 2 871 431 hectáreas (ha), el 31 por ciento del área agrícola.

Pero si bien se han entregado en usufructo más de 2 500 000 ha, principalmente para ganadería y cultivos varios, no se ha logrado aún el impacto que se demanda en los diferentes programas, subrayó el Jefe del Departamento Agroalimentario del CC-PCC.

También se reconoció que aunque en el país existen fortalezas para el desarrollo de la producción de alimentos, «en los últimos años, la crisis económica y el recrudecimiento del bloqueo han tenido un impacto significativo en el decrecimiento de las producciones agroalimentarias por déficits de financiamientos para adquirir insumos, combustibles, fertilizantes, productos fitosanitarios, medicamentos, materias primas para la alimentación animal, maquinarias y piezas de repuestos, entre otros».

Se han detectado, al mismo tiempo, deficiencias, indisciplinas e ilegalidades en la posesión, uso y explotación de la tierra y de la masa ganadera, que no se han enfrentado oportunamente por debilidades en la gestión estatal y empresarial del sistema de la agricultura, problema cuya solución es una prioridad para establecer el orden y la disciplina en esta importante actividad, se señaló críticamente en el VIII Pleno.

DE CARA AL CAMPO

A pesar de estrecheces y restricciones, en el último período se ha cumplido la campaña de siembra de frío de cultivos varios y marcha de forma favorable la de primavera, aunque los niveles de siembra, debe acotarse, no cubren las demandas alimentarias de la población, en lo que inciden también los bajos rendimientos de los cultivos.

Es consenso que para alcanzar el incremento de las producciones agropecuarias, en las condiciones actuales, se necesita sembrar y producir más, y es imprescindible la incorporación de todos los organismos, empresas y cooperativas con posibilidades de producir alimentos y garantizar una mejor atención a sus trabajadores, asunto que no ha avanzado adecuadamente.

La creación de autoconsumos, por ejemplo, tampoco marcha con la agilidad que se exige. Solo se han entregado para este propósito 31 151 ha, a organismos, empresas y entidades, insuficiente teniendo en cuenta la cantidad de tierra ociosa y deficientemente explotada que hay en cada uno de los territorios, se denunció.

En cuanto el desarrollo de los polos productivos, se conoció que un grupo de ellos no logra los resultados esperados, presentan deficiencias en el uso y explotación de la tierra, la disponibilidad de semillas, la gestión de la fuerza de trabajo y la utilización de los equipos de riego disponibles. Solo decir que las empresas agropecuarias estatales aportan apenas entre un 15 y 20 por ciento de la producción agropecuaria que se cosecha en el país.

También resulta insuficiente la creación de colectivos laborales en las empresas estatales y se requiere intencionar la atención a las comunidades rurales por parte de los Organismos de la Administración Central del Estado y los Órganos Locales del Poder Popular, entre otras dificultades a resolver.

Se coincidió, además, en la relevancia de continuar potenciado la ciencia y la innovación como pilar de la gestión de Gobierno y clave para encontrar soluciones, y en el fortalecimiento de las acciones de comunicación social que contribuyan a movilizar los organismos, instituciones, productores y la población en general con el objetivo de alcanzar una mayor soberanía alimentaria.

EL DEBATE

En un debate de los integrantes del Comité Central del Partido que se extendió por cerca de dos horas, el miembro del Buró Político y Secretario de Organización, Roberto Morales Ojeda, señaló que la producción agropecuaria, aunque está muy lejos de lo que se requiere, empieza a transformarse.

Seguir avanzando en esta dirección, reflexionó, requiere de un trabajo muy concreto del Partido. Sin suplantar lo que le corresponde a los gobiernos, los ministerios, las empresas, los órganos locales del Poder Popular, le corresponde exigir que cada cual haga lo que le toca, enfatizó.

En ningún lugar, ejemplificó, puede haber una máquina de riego sin un programa de siembra; y al Partido también le correspone que toda buena experiencia se acabe de generalizar. Estamos en mejores condiciones, pero falta mucho por hacer, señaló.

Al comenzar el debate, Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria del comité provincial del Partido en Mayabeque, territorio donde se desarrollan varias experiencias exitosas en la producción agropecuaria, informó del sistemático trabajo del Partido, la ANAP, los gobiernos municipales y otras instancias con las bases.

Desde el Partido, enfatizó, se le debe dar la atención que lleva a este sector, porque, señaló refiriéndose a observaciones del Primer Secretario del Comité Central, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, «los mayores gastos en que incurre la familia cubana hoy es en la compra de alimentos».

Crespo Baquero informó que está previsto que en el año, en Mayabeque se consechen 314 000 toneladas de productos agrícolas, por encima de las 287 000 toneladas que se recolectaron en 2023, para el abasto de los 381 000 habitantes de la provincia y aportar a la capital. Y se va logrando, dijo, a pesar de que se tiene menos combustible, menos lubricantes, menos maquinarias.

Subrayó que en este propósito está siendo fundamental el fomento de los cultivos rústicos, como el plátano, la yuca, el boniato; el impulso al programa del arroz popular y también a la ganadería. En Mayabeque, subrayó, cinco de sus once municipios se abastecen de grano y arroz. En la agricultura, señaló Crespo Baquero, «son muchos los retos, pero no podemos descansar y tenemos que poner al Partido en el centro de este trabajo».

Avanzado el debate, y coincidiendo con su colega de Mayabeque, el primer secretario del comité provincial en Ciego de Ávila, Julio Heriberto Gómez Casanova, se refirió al trabajo con los productores del territorio, que se refleja en que entre enero y junio de este año han crecido las ventas en los mercados agropecuarios estatales.

En junio, ejemplificó, se colocaron en esas tarimas, a precios más accesibles, cerca de 3 500 toneladas de productos agrícolas, 16 por ciento más que en mayo, aunque aun lejos de lo necesario. En los mercados estatales avileños, el pasado mes solo se puso cerca del 30 por ciento de lo requerido, aunque en la última semana se colocó en ellos 1 400 toneladas, el 50 por ciento de la demanda.

En consonancia con los dirigentes del Partido en Mayabeque y Ciego de Ávila, la primera secretaria de la organización en Sancti Spíritus, Deivy Pérez Martín, enfatizó que la producción de alimentos es una responsabilidad de cada uno de los cuadros del Partido, criterio compartido, entre otros primeros secretarios de las diferentes provincias del país, por Walter Simón Noris, de Las Tunas, quien subrayó que debe irse al funcionamiento integral de la organización desde la base.

«El funcionamiento del núcleo del Partido no es que se reúna, sino que logre una transformación en el entorno», sentenció Simon Noris.

La importancia de la promoción de la ciencia y la innovación para alcanzar la soberanía alimentaria también fue abordada por integrantes del Comité Central del PCC. La Doctora en Ciencias Marta Ayala Ávila, miembro del Buró Político y directora general del CIBG, informó sobre resultados como las vacunas veterinarias, el mejoramiento genético de granos y otros logros.

Se refirió al desarrollo, en estos momentos, de proyectos con entidades de AZCUBA, la Agricultura y otras para la producción de alimento animal. Comentó sobre el fomento de soya transgénica en 300 hectáreas para obtener semillas que en 2025 permitirían la plantación de unas 60 000 ha del grano, que a razón de una productividad discreta de 1,5 toneladas por ha permitiría disponer el próximo año de unas 90 000 toneladas de soya.

Otro proyecto es desarrollar con la agricultura 500 ha de maíz híbrido cubano para semilla, de forma tal que permitan en 2025 extender las superficies con este grano y obtener unas 100 000 toneladas del producto.

Emotiva fueron las experiencias narradas por la miembro del Buró Político y secretaria general de la FMC, Teresa Amarelle Boué, sobre varias iniciativas en el país para la incorporación de la mujer a la producción agropecuaria, que han permitido generar un movimiento que va revitalizando el trabajo de los bloques y la organización.

En el intercambio participaron los ministros de Agricultura, Ydael Pérez Brito, y de la Industria Alimentaria, Alberto López Díaz, quienes informaron sobre la reanimación paulatina en ambas ramas, aunque muy lejos de lo que se necesita. En el Minag, por ejemplo, aunque se cumplen los principales planes, las cosechas no se acercan ni al 50 por ciento de lo que hace falta.

Al final del debate, el viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca subrayaría que en la producción de alimentos y la implementación de la Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional se avanza, pero los resultados están lejos de lo que espera el pueblo. Por lo que ahora, dijo, lo que tenemos que preguntarnos es «qué nos falta por hacer y en qué tiempo lo vamos a lograr».


Contra las dificultades, la reflexión crítica y la acción

el VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba

En medio del desafiante contexto que vive hoy la nación cubana, ayer tuvo lugar la primera sesión de trabajo del VIII Pleno del Comité Central del Partido, encabezado por su Primer Secretario y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

La jornada centró el análisis del cumplimiento de los acuerdos que se han adoptado desde el 8vo. Congreso, la mayoría de ellos relacionados con la implementación de estrategias para el fortalecimiento de las organizaciones de masas, de la propia Unión de Jóvenes Comunistas, así como de la transformación del trabajo político-ideológico.

También se evaluaron las acciones para prevenir y enfrentar la subversión político-ideológica, caracterizada por una mayor agresividad del Gobierno de Estados Unidos. Se coincidió en aprovechar todos los espacios, físicos y digitales, para contrarrestar las campañas de intoxicación mediática contra la sociedad cubana.

También se debatió la situación de la industria azucarera, severamente atravesada por la insuficiencia de recursos materiales que la sostengan, aunque se reconoció la existencia de múltiples problemas de carácter subjetivo que evidencian que, en muchos lugares, hay cosas que no dependen de recursos y no se están haciendo bien, e inciden directamente en el decrecimiento de la producción.

Además, el Buró Político rindió cuenta de su gestión desde el anterior Pleno, y el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, actualizó sobre el estado de implementación de las Proyecciones del Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía durante el primer semestre del año 2024.

También se aprobó la incorporación de cuatro nuevos miembros al Comité Central, en sustitución de quienes ya no ocupan los cargos que desempeñaban, y dejaron de integrar esta estructura política.

Este sábado, el Pleno debate sobre la producción sostenible de alimentos, y acerca de las acciones para la prevención y enfrentamiento a la corrupción, el delito, las ilegalidades y las indisciplinas sociales.

(Con información de Granma)


Debaten en Cuba asuntos cruciales de su desarrollo económico y social

La producción sostenible de alimentos y las acciones para la prevención y enfrentamiento a la corrupción, el delito, las ilegalidades y las indisciplinas sociales, ocupan los debates del VIII Pleno del Partido Comunista de Cuba (PCC).

La reunión, encabezada por el primer secretario de esa organización política, Miguel Díaz-Canel, desarrolla este sábado su segunda jornada, conclusiva, con el análisis de diversos temas esenciales para la nación.

De acuerdo con la televisión nacional, este sábado se evaluó la aplicación de la Ley de Soberanía y seguridad alimentaria y nutricional, a dos años de su aprobación, y las dificultades para su implementación efectiva; entre ellas la falta de financiamiento e insumos, y los impagos los productores.

Fue abordada también la aplicación de la ciencia en la producción de alimentos, y el uso preferente de semillas nacionales.

(Con información de Prensa Latina)


Comienza este viernes el VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba

el VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba

El VIII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba sesiona durante este viernes y el sábado bajo la conducción de su primer secretario, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

En agenda están la producción de alimentos y la prevención y enfrentamiento a la corrupción, las ilegalidades e indisciplinas sociales.

El Buró Político rinde cuenta al pleno.



comité Central en su VIII Plen

El Comité Central del Partido Comunista de Cuba inició en la mañana de este viernes su VIII Pleno, encabezado por su Primer Secretario y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y conducido por el miembro del Buró Político y Secretario de Organización, Roberto Morales Ojeda.

En su octavo encuentro plenario tras el 8vo. Congreso del Partido, celebrado en abril de 2021, los miembros del órgano partidista analizan el cumplimiento de los acuerdos del anterior pleno y reciben una rendición de cuentas del Buró Político.

Evalúan, entre otros temas, el estado de implementación de las Proyecciones del Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía durante el primer semestre del año; y los resultados alcanzados en la producción de alimentos y la implementación de la Ley de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional.

El encuentro sesiona este viernes y sábado; los debates incluyen, además, las acciones dirigidas a la prevención y enfrentamiento a la corrupción, el delito, las ilegalidades e indisciplinas sociales.

La realización del VIII Pleno del Comité Central del PCC es garantía de la continuidad de la Revolución y de la unidad de los cubanos en torno al proyecto revolucionario y socialista y llega a este momento en medio de una intensa labor de su máxima dirección en los recorridos y visitas a los territorios.

(Noticia en construcción. Con información de Presidencia Cuba)

Se trata de un sistema de trabajo que fortalece la labor de la organización y confirma la voluntad de continuar atendiendo las principales inquietudes de nuestro pueblo de forma priorizada y personal.

El Buró Político, que rinde cuentas al Comité Central en su VIII Pleno, ha continuado trabajando con prioridad en la corrección de distorsiones y reimpulso de la economía, en la búsqueda de soluciones para revertir la situación actual de país.

Se ha trabajado, al mismo tiempo, para el cumplimiento de los acuerdos adoptados en el pleno anterior, en medio de las presentes circunstancias, garantizando la continuidad del trabajo de la organización y su proyección a la sociedad.

Los acuerdos que emanen de este pleno, a su vez, deben ser objeto de especial atención, con vistas a garantizar las mejoras necesarias en nuestra sociedad, particularmente en la corrección de distorsiones y el reimpulso de la economía, y donde la participación de los militantes es decisiva en la producción de alimentos y en los programas para el desarrollo nacional.

El rol de la militancia es vital, al mismo tiempo, en la promoción de la verdad de nuestro país, empleando todos los medios a su alcance, especialmente las redes sociales de Internet, algo que es hoy más importante que nunca.

En las circunstancias actuales, es guía para el trabajo del Partido la máxima del lider de la Revolución, General de Ejército Raúl Castro Ruz, quien señaló que: «vamos a salir de estas dificultades, como lo hemos hecho siempre ¡combatiendo!».

(Noticia en construcción. Con información de Presidencia Cuba)