Cuba demanda en la XIX Cumbre del MNOAL el inicio de acciones prácticas para contribuir al cese de la barbarie en Gaza«Cada época histórica conlleva desafíos, y la actual nos plantea retos decisivos para el futuro de la humanidad», valoró el miembro del Buró Político y vicepresidente de la República de Cuba, Salvador Valdés Mesa, al intervenir en la mañana de este viernes (hora local) durante la sesión inaugural de la XIX Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL).

Sus palabras trajeron a Uganda compromiso, respaldo, denuncia, solidaridad, complementariedad y unidad en nombre del Grupo de los 77 y China, organización de la cual Cuba ocupa actualmente la presidencia Protémpore. «Es un alto honor y privilegio participar en esta importante cita en el continente africano, la tierra de nuestros ancestros», aseguró Valdés Mesa.

Y como «principal foro de concertación política de los países del Sur, en defensa de la paz, la independencia y el desarrollo de nuestros pueblos» que es el MNOAL, el Vicepresidente cubano propuso que desde este espacio, siendo consecuente con el apoyo histórico al pueblo palestino, se emprendan sin demora cuatro acciones prácticas, como contribución a los esfuerzos por detener la barbarie actual que contra ese pueblo se comete.

En tal sentido, pidió demandar en todos los espacios posibles el cese inmediato al fuego en Gaza y el resto de los territorios palestinos ocupados; y apoyar el envío urgente a la Franja de Gaza de una misión de protección internacional, autorizada por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con el mandato de garantizar la seguridad y la protección de la población civil y facilitar la entrega de ayuda humanitaria de emergencia, incluyendo agua y alimentos.

A su vez, solicitó convocar «una sesión reanudada del periodo extraordinario de sesiones de emergencia de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la que el Movimiento proponga una resolución convocando con urgencia una Conferencia de Paz bajo los auspicios de Naciones Unidas, que permita preservar los derechos inalienables del pueblo palestino, incluyendo su derecho a disponer de un Estado independiente y soberano dentro de las fronteras anteriores a 1967, con Jerusalén Oriental como capital, así como apoyar el pronto ingreso del Estado de Palestina como Estado Miembro pleno de la ONU».

De la historia, presiones y desafíos que ha vivido el MNOAL habló también Valdés Mesa en su discurso. Suman ya más de seis décadas «de esfuerzos conjuntos para preservar la unidad del Movimiento de Países no Alineados y de desafiar enormes presiones externas por dividirlo y debilitarlo».

En la diversidad que distingue a sus miembros, consideró, radica también una gran fortaleza que «nos permite encontrar consenso entre los diversos puntos de vista, basado en los principios y valores que compartimos».

Durante su discurso recordó, además, cómo desde la voz de los países que integran el MNOAL se «ha encabezado la defensa de múltiples causas justas en el mundo, entre ellas la lucha contra el colonialismo, el neocolonialismo, el fascismo, el racismo y el apartheid».

«Nuestro accionar coordinado constituye una necesidad impostergable frente al orden internacional prevaleciente, profundamente injusto, excluyente y discriminatorio hacia nuestros pueblos», subrayó.

Contundente fue, igualmente, el firme rechazo «a la aplicación de medidas coercitivas unilaterales que se imponen contra varios Estados miembros de nuestro Movimiento», así como el apoyo de Cuba «al derecho a la autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental».

Asimismo, denunció cómo el orden global vigente se caracteriza por múltiples crisis, alta polarización social, crecientes asimetrías, conflictos geopolíticos y una marcada erosión del multilateralismo. En tanto, dijo, la «arquitectura financiera internacional, diseñada por los países más ricos para su beneficio, persiste como un obstáculo a las aspiraciones de desarrollo de nuestras naciones».

En su voz, desde el Sur, fueron sumamente justos también los reclamos porque se logren verdaderos «compromisos financieros de los países industrializados, principales responsables de la depredación y el sobrecalentamiento global». Los hechos hasta el momento resultan insuficientes.

«Solo la cooperación y la solidaridad entre todos los países serán efectivas para enfrentar los colosales desafíos actuales y por venir», recordó el Vicepresidente de la República de Cuba, quien reiteró el «compromiso de Cuba con la cooperación internacional solidaria, en particular la cooperación Sur-Sur, sobre la base del respeto mutuo, la ayuda desinteresada y la complementariedad».

Desde la Mayor de las Antillas, aseguró, «pese a nuestros limitados recursos y el brutal bloqueo que enfrentamos, mantendremos la cooperación con otros países necesitados, en el marco de nuestras posibilidades, siguiendo el principio de compartir con modestia lo que tenemos».

En nombre del pueblo cubano, Valdés Mesa agradeció el firme rechazo del Movimiento de Países No Alineados a la criminal política estadounidense y el rechazo a la injustificada inclusión de Cuba en la espuria lista unilateral de Estados patrocinadores del terrorismo.

No hay una sola familia cubana, enfatizó, que escape a los terribles efectos que provoca la guerra económica de Washington contra Cuba, que no ha cesado un solo día durante más de 60 años.

Finalmente, reconoció y felicitó a Azerbaiyán «por su destacada labor al frente del Movimiento, en un periodo especialmente complejo marcado por la pandemia de COVID-19, que demandó esfuerzos adicionales».

De igual manera, deseó «los mayores éxitos a Uganda en el desempeño de su presidencia, en el trienio 2024-2026, para lo que podrá contar siempre con el pleno apoyo de Cuba».

«Juntos, hemos luchado para llegar hasta aquí y juntos, hemos conseguido victorias trascendentales para nuestras naciones», sentenció.

Juntos, reflexionó, debemos «continuar librando la necesaria lucha por un futuro digno, justo, próspero y sustentable para nuestros pueblos. En la primera línea, siempre estará Cuba».

Por Granma