Guantánamo.- Varaentierra es un ingenioso invento de los aborígenes que surgió como respuesta a la constante amenaza de los ciclones tropicales en la isla. Desde tiempos antiguos, las islas antillanas han sido vulnerable a estos fenómenos naturales, pero el ingenio y necesidad de su habitantes dieron lugar a esta construcción única.

Originalmente conocido como «Bahío», «Bohío» o «Rancho de Vara en Tierra», el término se acortó con el tiempo a «Varentierra».

Esta estructura no es simplemente una casa; se trata de una habitación pequeña, provisional e improvisada, que en sus inicios servía como refugio para campesinos ante las inclemencias del tiempo.

A pesar de su diseño sencillo, la efectividad del Varentierra lo transformó en una construcción permanente, convirtiéndose en un símbolo de resistencia para los guajiros cubanos frente a las tormentas tropicales y huracanes.

La utilidad del Varentierra se mantiene vigente en la actualidad en lugares intramontanos como Velete, en Maisí, y ahora se probará en esta temporada ciclónica cuando se sientan los efectos del  huracán  Melissa.

Este legado arquitectónico no solo refleja la capacidad de adaptación de los cubanos ante los desastres naturales, sino también su profunda conexión con el entorno y la cultura rural.

La construcción está hecha principalmente con materiales accesibles y técnicas tradicionales, lo que facilita su edificación en zonas rurales donde los recursos pueden ser limitados.

Muchos de los pobladores de zonas de difícil acceso en el municipio Niceto Pérez tambien utilizan el varentierra para salvarse de los embates de los meteoros.

La historia del Varentierra demuestra una tradición que ofrece soluciones efectivas ante adversidades naturales y sobre todo salva vidas.

Fotos y textos de Chely Tamaño