Guantánamo – El desarrollo de la lombricultura es una necesidad impostergable para disponer del abono orgánico con mayor calidad frente a la imposibilidad de adquirir fertilizantes químicos y la demanda de producir alimentos sanos.
Admiradas por unos por la fertilidad que imprime a la tierra, repulsivas ante la mirada de otros a causa de su desagradable aspecto y codiciadas por muchos en el mundo gracias a los valores de su carne ideal para la alimentación humana, la lombriz de tierra resulta un animal controvertido, pero sin dudas muy útil al hombre.
Son célebres por producir el humus, un excelente abono natural desprovisto de sustancias químicas y generador de vida al suelo, el cual es obtenido de la digestión de la materia orgánica ingerida por ellas.
José Lescaille, profesor de la Universidad de Guantánamo y especialista en abonos orgánicos, explica sobre la posibilidad de utilizar diversas materias para alimentar a las lombrices.
El periodista Geovanis Ramírez Rojas aporta mas información sobre el tema en el siguiente reporte.