En menos de un año Cuba volverá a un Mundial de Futbol en la categoría Sub-20, esta vez en la edición que celebrará Chile en 2025, una hazaña que logró la selección juvenil en el Campeonato de la Concacaf en esa categoría, con sede en México, el pasado mes de agosto.
Dicho torneo vio a una estrella brillar bajo los tres palos de la portería cubana, el artífice principal de la gesta, cuando atajó 23 balones y fue seleccionado como el mejor portero del campeonato, además de sumarse al once ideal de la competición, ese joven fue el guantanamero Yurdi David Hodelín Ramírez.
Cambio de planes desde el principio y una decisión vital para el futuro
“Antes de ser futbolista era pelotero, pero me decepcioné del beisbol y dejé de practicarlo…, mi padre al principio estaba un poco incómodo por mi decisión, pero mi mamá siempre me apoyó, me transmitía calma, ella fue atleta y entendía mi posición.
“En el futbol comencé a entrenar y entre cuarto y quinto grados, fui a un torneo nacional de fútbol para todos, donde compiten varones y hembras. Yo jugaba en la posición delantera en ese momento, pero una semana antes del evento, el portero del equipo se lesionó el brazo y los profesores buscaron a alguien que lo remplazara; me ofrecí, me prepararon esa semana, y para nuestra alegría ganamos la competencia y salí con el mejor arquero de Cuba.
“Al regreso el profesor Yunior Torres me llevó a entrenar con los juveniles en la EIDE, sin pertenecer a esa categoría todavía. Con él fui a una Copa en Las Tunas, para ir observando las técnicas que posteriormente debía desarrollar. Gracias al profe Yunior en séptimo grado inicié mis estudios en la EIDE en la categoría escolar.
“Siempre tuve la confianza de mis profesores, desde Yunior Torres, Manuel Portuondo, Yoannis Vazquez, Fidel Salazar y Erney Borney. Me asustaba un poco porque los otros atletas tiraban duro y yo tenía que atajar balones, su apoyo era fundamental en ese momento y gracias a ellos yo subí a la categoría juvenil.
Clasificación al Mundial Sub-20 Chile 2025
“En Nicaragua había jugado las preliminares para la clasificación al premundial de México, donde alcanzamos el boleto mundialista. Tenía un poco de experiencia y no me rendí, sé que debo entrenar para perfeccionar mi nivel, pero ya en ese momento, cuando fuimos a Venezuela disputamos varios partidos amistosos, estábamos en mejores condiciones, y dejamos buenas impresiones”.
Guante de Oro del Campeonato Sub-20 de la Concacaf
“El partido contra Honduras (en cuartos de final) fue decisivo para mí, en los primeros 15 minutos estuve nervioso, pero me adapté rápido y los demás jugadores del equipo me transmitieron serenidad, lo que me dio el ánimo. Ya en la tanda de penales, miré al árbitro y le dije que tenía fe en que clasificaríamos al Mundial Sub-20 de Chile 2025, no atajé, pero un jugador de Honduras pegó el balón al poste de la portería y la pelota vino a mí, ese día ganamos y aseguramos un puesto al próximo Mundial en 2025.
“Tuve un buen partido contra Costa Rica, que me permitió estar en el primer once ideal. La confianza me permitió jugar con los pies y en varias ocasiones ganar los duelos aéreos de los tiros desde la esquina. Tenía mucha seguridad, aunque mis compañeros decían que la delegación de los Estados Unidos solo había permitido un gol y que yo recibí ocho.
“El día de la final estaba en las gradas y varias personas de la Concacaf me llevaron al túnel de premiaciones, donde me dijeron que fui seleccionado como el mejor portero del campeonato y me entregaron el Guante de Oro. Es un reconocimiento a mi desempeño, que por momentos intenté ser un líder dando ánimos a la selección, organizando la defensa, que estuvieran concentrados que yo iba a hacer mi mejor esfuerzo bajo los tres palos.
La portería es la posición más arriesgada
“El guardameta ocupa un lugar imprescindible en el equipo, porque tiene que dar orden al equipo con mucha visión, atento a su defensa, sus rivales, sin perder la concentración y mantener 180 grados de visión, porque cuida la meta, y es quien salva o no a la defensa, porque cuando la defesa falla se queda solo ante la ofensiva del contrario.
“Quiero seguir trabajando sobre mis deficiencias, no siempre se tienen días buenos, pero debes entregar lo mejor de ti. Sueño con estar en algún club importante, ayudar a la familia, amigos, a las personas que siempre están ahí.
Yurdis, un atleta despierto y singular, avanzado para su edad se despide de este intercambio con la promesa de convertirse en el mejor guardameta de Cuba. Me esforzaré para cumplirla”.