En su presentación del mensaje de memoria y cuenta del año 2023, el mandatario reveló que las operaciones incluían su asesinato, el del ministro de Defensa Vladimir Padrino y otros líderes civiles y militares, y responsabilizó a la Administración de Control de Drogas (DEA) con base en Colombia y la CIA.
Añadió que la base de la DEA en ese país vecino y sus funcionarios principales siguen actuando junto a los grupos del narcotráfico y conspirando contra la República Bolivariana.
El mandatario afirmó que las cuatro conspiraciones fueron planificadas desde Miami, Estados Unidos, y Colombia, en los meses de mayo, agosto, noviembre y diciembre y en las mismas participaron componentes extranjeros.
Se hicieron todas las diligencias judiciales, de inteligencia e investigación pertinentes y fueron desmanteladas, expresó.
Indicó que le informó al gobierno colombiano que la base de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estadounidense en ese país, establecida durante los gobiernos de Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos e Iván Duque, “sigue actuando de manera secreta e impune”, conspirando contra Venezuela.
Maduro aseguró que esta conspiración une el eje Miami-Colombia y tiene su epicentro en la frontera con la nación neogranadina.
Señaló que las cuatro oportunidades serán conocidas y apuntó que está entregando pruebas, grabaciones, testimonios, “porque todos los involucrados civiles y militares, nacionales y extranjeros, están convictos y confesos».
Las cuatro conspiraciones que la ultraderecha montó, junto al narcotráfico colombiano, la CIA y la extrema derecha miamense, tenían el objetivo, además, de crear “un caos y una conmoción” en el país para cortar el proceso de paz y estabilidad, de recuperación y para que no llegara el 2024 en paz, acotó.
Comentó que el objetivo de la última intentona era asaltar una unidad militar de San Cristóbal, estado de Táchira, el 1 de enero de 2024 en horas de la madrugada con la participación de desertores, traidores, militares traídos de Miami, de Perú y Colombia.
Lamentó la implicación de algunos oficiales, “pocos, un puñado”, captados en los años 2020 y 2021, y que fueron comprados por parte de la CIA.
Todos están presos, convictos, confesos, todos declararon su traición y crimen, los descubrimos, gracias a la inteligencia, a la investigación, subrayó.
Maduro agradeció la enorme lealtad probada de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, el Servicio Bolivariano de Inteligencia, a la Fuerza Armada Nacional y a la inmensa unión cívico militar policial.
No han podido con nosotros ni jamás podrán, aseguró, y afirmó que la gran garantía de la patria y de la paz es seguir derrotando conspiraciones.