Desde hace poco más de una semana se realiza los martes y jueves en la noche, en diferentes comunidades con determinadas situaciones de vulnerabilidad, el nuevo y necesario espacio de comunicación comunitaria En Diálogo Abierto con el Pueblo, para intercambiar con la población sobre las principales problemáticas presentes en los barrios, así como la búsqueda colectiva de sus posibles soluciones, a partir del apoyo gubernamental y la participación popular.
Bien acertada y aceptada es la idea de estos encuentros que conduce Yoel Pérez García, primer secretario del Comité provincial del Partido, junto a las máximas autoridades del Gobierno y del municipio, y donde también tienen participación proactiva directores de organismos y entidades, representantes de las organizaciones de masas y los factores de la comunidad.
Hasta la fecha las barriadas de Ho Chi Minh, Palmira y Primero de Mayo fueron escenario para el interactivo intercambio donde se analizan planteamientos históricos devenidos de los diferentes procesos de Rendición de Cuenta del Delegado del Poder Popular a sus electores, con el propósito de buscar una articulación local en el tratamiento a diferentes problemáticas, y se buscan o encaminan sus perspectivas o inmediatas soluciones.
En momentos tan complejos como los que se viven, signados de muchas dificultades, se reflexiona sobre la situación energética actual y los persistentes apagones, de inversiones hidráulicas y el trabajo comunal, la tardía e inconsistente entrega de los productos de la canasta familiar, los viales, el transporte, la vinculación de los jóvenes al empleo, el enfrentamiento al delito e indisciplinas sociales, la vivienda, la erradicación de pisos de tierra y otros temas que tanto preocupan e inciden en la vida de los guantanameros.
Pero sobre todo se escucha a la población y sus inquietudes, casos relacionados con la necesidad de viviendas y la legalización de hogares nacidos de la constante emigración hacia la periferia de la ciudad, la falta círculos infantiles o seminternados para niños de madres de más de tres hijos, la estabilidad en el abasto de agua, obstrucción de fosas, y lo imprescindible de acercar nuevos servicios públicos a las comunidades, por solo citar los planteamientos más recurrentes.
Sin dudas, es “Dialogo con el Pueblo”, al menos hasta el momento, un ejemplo de lo que se puede y se necesita hacer en materia de comunicación comunitaria, donde la información se convierte en articuladora de los derechos ciudadanos.
En cada encuentro se refuerza la tesis de la profesora Marilys Zayas de que “la información es el eje de la comunicación popular. Hay que tenerla en cuenta en todos los aspectos de la vida que propician la creación de códigos culturales para el desarrollo de la actividad común, de resistencias y de alternativas”.
La experiencia en mi opinión, tendrá que traspasar las fronteras de la cabecera provincial, y al menos una vez al mes hacerse en comunidades rurales y montañosas de nuestra geografía. Mucho lo agradecerán sus habitantes.
Y aunque falta mucho por hacer y reflexionar “Dialogo con el Pueblo” demuestra que hay muchas maneras de llegar a las personas y estar cerca de ellas. Ese es el reto crear una comunicación donde todos puedan aportar.