Precisamente, este lugar forma parte del programa de la 14 edición del Evento Internacional de Turismo de Naturaleza (Turnat 2024). Ese contexto es beneficiado por la modalidad de turismo de circuitos, que el Ministerio de Turismo (Mintur) de la isla retoma con fuerza.
Guantánamo tiene más de 500 mil habitantes, y el 70 por ciento del territorio es montañoso con destaque en cuanto a actividades económicas en la agricultura, cultura, historia y productos turístico vinculados con la naturaleza.
Uno de los historiadores de la provincia, Luis Figueres, en su momento mencionó la Loma de la Gobernadora como el entorno más elevado y mirador, cuando recordó que por allí estuvo el 30 de abril de 1494, durante su segundo viaje a la isla, el almirante Cristóbal Colón.
Dicho mirador se encuentra propiamente en la Loma La Gobernadora, recalcó, más conocida por los lugareños como Loma de La Herradura, a 27 kilómetros de Guantánamo, la cabecera provincial, en la vía que une Guantánamo-Mirador La Gobernadora y Baracoa.
Sin embargo, el punto más sobresaliente de escala para los paseos está en la ciudad de Baracoa, quizás la ciudad más interesante de toda Cuba. Un paisaje muy especial le rodea, urbe de montaña, de cultura, ríos y tradiciones, como la consideran los estudiosos, tal es el caso de su historiador Alejandro Hartmann.
El primer impactado por ella fue Cristóbal Colón, el 27 de noviembre de 1492, quien escribió en su Diario de Navegación: La más hermosa cosa del mundo.
El municipio de Baracoa se encuentra con limites por el norte, el Océano Atlántico, por el sur, Imías y Maisí y por el oeste Moa. Tiene una extensión de 97 mil 600 hectáreas y una población de 78 mil 214 habitantes (2023), con una densidad de 84,5 habitantes por kilómetro cuadrado.
Los principales productos de la región son el coco, el cacao y el café, aunque desde finales de la década del 90 del pasado siglo el turismo se convirtió en una de sus principales fuentes de ingreso debido a su extraordinaria belleza.
La ciudad fue fundada el 15 de agosto de 1511 con el nombre de Nuestra Señora de la Asunción de Baracoa por el conquistador español Diego Velázquez, y el caminante que se respete debe visitarla tan siquiera una vez, en sus peregrinajes por Cuba.